El 9 de Julio organizamos en el Institut Transpersonal de Barcelona, junto con su Directora Magda Solé, el primer Taller sobre el Despertar del Héroe.
Mi descubrimiento del Mito del Viaje del Héroe con mi tesina de investigación hace 4 años, ha supuesto un antes y un después en la interpretación del curso de mi vida. Siempre me he considerado un buscador, ya desde los 15 años, pero un buscador que todavía no había encontrado aquellas referencias que guían y nos sostienen en la vida. Aquellas referencias que dan un sentido mucho más profundo a todo lo que hacemos. Actualmente siento que el Viaje del héroe tiene una profundidad de significado que me ayuda a recorrer un camino que nadie ha recorrido antes. Adentrarse en el bosque oscuro sin referencias es una experiencia muy distinta a adentrarse en el mismo bosque sabiendo que el hacerlo forma parte de un patrón universal; el saber que trazar nuestro propio camino es vital para el desarrollo de lo que somos y podemos llegar a ser, ayuda en momentos de dificultad. Según mi experiencia aporta fuerza, valor, constancia, determinación y convicción de que las elecciones que tomamos para vivir lo que queremos, es crucial para ser quienes realmente somos. ¿Qué vida vivimos, la nuestra, o la de alguien de nuestro entorno? Es muy importante ser consciente de qué vida estamos viviendo para que cuando llegue el momento de dejar este plano, podamos sentir la satisfacción de haber sido nosotros mismos. Es lo que Joseph Campbell llama «follow your bliss», traducido como «persigue aquello que te aporta plenitud».
Uno de los conceptos que traté de transmitir con este primer taller fue precisamente la importancia que tiene este Mito para nuestras vidas, ya que estamos huérfanos de mitologías, mitos y referencias que nos sostengan a lo largo de todas las fases de la vida, que nos sostengan bajo este gran misterio que es existir. Conocer el Viaje del Héroe con el conjunto de elementos que lo construyen, como son las diferentes fases por las que atravesamos, los umbrales, las iniciaciones de conocimiento y experiencia, los retos a los que debemos hacer frente y las necesidades vitales por las que pasamos, me parece espiritualmente muy práctico para el día a día.
Ahora hablando en concreto sobre el Taller del 9 de Julio, como cuando uno termina una sesión terapéutica con un cliente, la sensación y el sentimiento con el que nos quedamos es muy indicativo de cómo ha ido la sesión. Del mismo modo, mi sensación interior tras el taller fue de gratificación, de satisfacción y de realización interior. Es mi percepción que el Taller fue muy bien, tanto por la recepción de las propuestas como por la dinámica de grupo que se generó. Que incluso nuestra adaptación a los cambios de horario y planteamientos iniciales hicieron que al final todo fluyera por si solo hasta el final de una manera mucho más natural que la que habíamos planeado.
Nada más terminar, mi mente ya se proyectó al siguiente, para incorporar nuevos conceptos y mejorar la dinámica general, con el fin de conseguir que la importancia del Mito pueda realmente llegar a lo más profundo posible de cada uno de los participantes. Es desde ahí desde donde a posteriori emerge en nuestra vida como herramienta de reubicación mitológica y de significado.
Me gustaría poder compartir con otras personas, los mandalas que se hicieron al final de la sesión con una breve descripción de su significado:
Comentario sobre el mandala de la 1ª Col. el 2º:
Hola a todo el mundo 
Ha pasado mucho tiempo desde que estuvimos juntos en el taller y a pesar que lo había pensado varias veces, no sabía que poner respecto al mandala. Ahora, cuando le encuentro cierto sentido no se como pegar el comentario debajo de la foto, jeje, así que os digo cual es y pongo mi breve comentario. Es el segundo empezando por arriba. el que tiene 4 cuadrantes. Y por el tema de los cuadrantes va el significado que le doy. Mirando una conferencia que dio Pepón en St. Cugat por youtube, me he dado cuenta de que una de las diapositivas que mostraba va sobre un mapa con dos ejes (Yo-Colectivo y Interior-Exterior), que a su vez generan cuatro cuadrantes sobre varios aspectos que conforman nuestra existencia y de sus sus procesos, los cuales hay que traer a la conciencia (que se situaba como un punto dónde se cruzan los dos ejes, en el centro). Dado que me siento en este proceso de toma de conciencia, para mi este mandala contiene símbolos referentes a “mi mapa” y esa conexión la sentí de manera interior viendo el video. Conscientemente, todavía no le doy un significado explícito a los símbolos, pero estamos en ello. Os deseo fuerza y ánimo para seguir adelante en este camino de toma de conciencia, pues no es fácil. También os mando un saludo y un fuerte abrazo! Jordi
Comentario sobre el mandala de la 2 Col. 3º
«De alguna forma pretendía representar un sueño en el que me ví corriendo por encima de las copas de los árboles de un bosque gigantesco. La altura era enorme. Corrí sin parar hasta llegar al límite, desde donde lo único que podía ver era un mar de nubes que ocultaban totalmente lo que había debajo. Sentía la necesidad de saltar al vacío pero me aterraba la idea de matarme, dada la gran altura a la que me encontraba, y no saber lo que habría más allá.
Lo que acabé pintando no se parece en nada a lo que pretendía pintar. Creo que lo que «surgió» sin yo darme cuenta representa, de alguna forma, aquello que había bajo las nubes… o lo que me gustaría que hubiese. No lo sé. Pero lo que sí sé, o siento, es que los colores (verde, azul, amarillo, rojo y naranja) representan las distintas «capas» (tal vez chakras) de mi ser y las formas (tierra, nubes, vibraciones) las distintas «sutilidades» con las que las experimento».
Comentario sobre el mandala de la 3ª Col. el 2º:
«Yo no sabía qué estaba dibujando porque tampoco me había planteado qué quería dibujar. Sencillamente, comencé a colorear. A medida que lo iba haciendo, apareció, sin saber por qué, la estrella. No la busqué, pero lo que sí empezaba a tener claro a esas alturas del mandala era que quería dibujar rayos, muchos rayos de muchos colores desde un mismo centro hacia todas partes. Veo ahora el resultado como algo lleno de color, de brillo, de vida, como algo explosivo, casi, casi, un pequeño big bang. Y en este momento, varios días después, tengo perspectiva para relacionar más cosas. Al inicio del taller cogí la carta de la transformación y, si alguno de vosotros recuerda, expliqué después que tras un largo período de importantísimos cambios, estaba volviendo al mundo «normal», y sentía duda e incertidumbre. ¿Era eso lo que tenía que hacer? ¿Eso, lo que quería?
El maravilloso y «normal» trabajo que recientemente apareció ya no existe, de modo que quizá ese big bang de papel sea el origen de un nuevo universo…»
